Hace poco terminé de leerme Buscaba la belleza (Jesús Terrés), pero aún le sigo dando vueltas. Si no te lo has leído, no esperes más, escribe tan bonito que te atrapa y sus letras te calan hasta las entrañas.
BELLEZA.
Conste que no estoy hablando de belleza física, que también, pero que es totalmente subjetiva. ¡¡De lo contrario, que haríamos los feos!! Hablo de la belleza como motor de vida. Mucho más allá de lo superficial… Aunque lo superficial también es necesario.
Si te pregunto qué es la belleza para ti, seguramente, aunque sabes muy bien qué es para ti, te costará verbalizarlo. Y seguramente también la definición que me des será muy diferente de la que daría yo. Y también admito que me cuesta ponerle palabras.
Pero por encima de las palabras están las emociones, las sensaciones. SENSACIONES. Esas capaces de erizarte la piel, dejarte sin palabras, transportarte, sonrojarte, enamorarte, sentir. SENTIR.
Y seguramente estas sensaciones serán muy similares a las mías. Y forman la mejor definición de belleza que se me ocurre.
Esa mesa que has preparado con cariño porque quieres dar una sorpresa a tu pareja o porque esperas la visita de tus padres.
El beso de buenos días mientras aún estás medio dormida.
El audio de mis sobrinas dándome las buenas noches.
La copa de vino (para mí tinto por favor) acompañando ese queso viejo del Roncal.
Ese libro leído con calma al abrigo de la chimenea, bajo una cálida manta, en calcetines de colores. Siempre un toque de color por favor.
Ese cuadro de Feito que te observa desde una de las paredes de tu casa. Ese recordar quien te lo regaló y la loca historia que hay detrás.
Ese paseo por el campo, entre parcelas, que siempre son las mismas, pero nunca son iguales. Ese colorido que te sorprende y atrapa.
El olor a café por la mañana, con música, siempre música. Recién levantada, hábleme más tarde por favor.
Ese meterte a la cama feliz porque has intentado hacer un poco más bonito el día a la gente que quieres. (Obviamente incluye no dar por saco a la que no quieres).
Ese estar en cualquier sitio con la gente que quieres. Esas miradas, besos, abrazos, risas.
Ese…ya sabes, todas esas cosas que haces a lo largo de tu día.
Porque, aunque juguemos a otra cosa para hacernos los interesantes, sabes que lo importante no son los grandes acontecimientos, sino los pequeños detalles del día a día.
Y sí también, ese rodearte de cosas bonitas. Porque, aunque acusemos a la belleza de frívola, inútil y poco práctica. ¿Acaso hay algo más práctico y esencial que hacernos la vida más bella?
AQUÍ VA LA RECETA DE HOY
Ideal: Consumir en un domingo lluvioso.
Tiempo de preparación: 45 minutos.
Ingredientes
- Calma. Siempre desde la cama y el disfrute.
- Lista 35 Briznas Design: canción Así bailaba (Rigoberta Bandini y Amaia)
- Vela Nº 1582 Kyoto Gardens de Potions
- Mesa zona de sofá cuadrada
- Velas, jarrones, flores, libros, revistas, y un largo etcétera de cosas que vas dejando sobre la mesa. Eso sí, ahora de forma ordenada y bonita. Vamos, que te dará gusto ver tu mesa.
Dale al PLAY
Y sube el volumen, y canta y baila…y ve despejando tu mesa del cuarto de estar.
Mientras suena la canción, distribuye mentalmente la mesa en cuatro cuadrantes, te ayuda a realizar la mejor composición.
Así bailaba, así, así, déjate llevar por el estribillo y ve tomando nota de estas opciones para cada cuadrante. Te doy algunas ideas para colocar en cada una de las partes imaginarias de tu mesa. No todas, cúrratelo un poco (es domingo, pero con música todo se ve diferente), ahora mira qué objetos decorativos tienes y qué objetos necesitar tener ahí cerca.
Mientras sigues bailando y cantando a todo pulmón, ve probando con alguna de las siguientes ideas:
- Bandeja con velas
- Jarrón con flores o ramas
- Libros o revistas
- Vacía-bolsillos
- Tu juego de licor. Vasos y botella de cristal.
- Bandeja con “póngase aquí lo que considere”. Toma nota de este secreto, las bandejas son tus aliadas. Eso sí, las bandejas tienen que ser bonitas.
- No te olvides de los objetos que necitas cerca, como el mando de la televisión.
Lo sé, te gusta la rectitud y la simetría, pero evita poner todos los objetos en la misma posición. Disfruta girándolos, agrupándolos…Crea composiciones armoniosas y vistosas. Si quieres ver como, tendrás que seguir otra de mis recetas.
Evita recargar la mesa. Los pequeños objetos ponlos dentro de una bandeja, caja, cofre o similar, ¡¡nunca más tirados por cualquier sitio!!
Recuerda, nunca pongas una vela nueva, dan un aspecto raro, apuesta por una ya usada. Si no la tienes, estupendo, es momento de prender la mecha y cambiar esta situación. Si no te gusta encender velas, o te da miedo por el fuego, ¡¡prueba con las eléctricas!!
¿Y qué me dices del olor de la vela? Ha transformado tu salón en un jardín.
Y mientras las últimas notas suenan, ahí está, tú maravillosa mesa de centro decorada como recién salida de una revista. Y maravilla, encontrarás todo lo necesario.
Que aproveche ese té bien calentito.
Maridaje
Hoy te lo pongo fácil.
Ingredientes:
- Bolsa de té de tu sabor favorito.
- Para mí un té White satin de Sans & Sans.
Preparación:
- Estoy de que sabes prepararte un té 😉, así que esta parte me la salto. Lo que sí te recomiendo es que le añadas una ramita de canela.
Y tú, ¿qué propones? Atrévete a compartir tus recetas de decoración.
P.D. Puedes encontrar imágenes muy bonitas (o eso intento) en mi Instagram @35briznasdesign
P.D. 2 Si quieres ver ideas en directo, te espero rodeada de poetas, frente a un parque del Queiles que está precioso. Si no te apetece pasear, tienes gran cantidad de aparcamientos disponibles. Pues eso, que te pases por Paseo de los Poetas 16 bajo, Tudela (Navarra).
P.D.3 No te pierdas las próximas recetas (prometo ir subiendo el nivel de los maridajes). click
P.D.4 ¿CREAMOS?